Durante los últimos años, la formación continua en España ha experimentado una notable evolución tanto en calidad como en cantidad. En la actualidad, y gracias al desarrollo de las nuevas tecnologías y a la expansión de internet, es posible mantener unos conocimientos actualizados, e incluso ampliar los conocimientos existentes, desde cualquier lugar y en cualquier momento. Para ello, tan sólo es necesario contar con una conexión a internet y con un dispositivo, ya sea ordenar, tablet o smartphone.
Por otro lado, la crisis económica y el aumento del desempleo han favorecido al incremento de la competitividad, no sólo entre empresas, sino también entre candidatos a un determinado puesto de trabajo. Ya no basta con demostrar ser un buen trabajador y cumplir con los requisitos para el puesto al que se aspira, sino que es imprescindible ser el mejor de los candidatos, poseer esa nota diferenciadora en el CV que actúa como valor añadido y que permite diferenciarse del resto.
Pero la formación no acaba cuando se accede a un puesto de trabajo. Muy al contrario, a partir de ese momento es imprescindible mantener una formación teórica y práctica plenamente actualizada, no sólo para sentirse realizado personalmente, sino también para mejorar las condiciones laborales, e incluso para mantener el propio puesto de trabajo.
La formación continua es importante en lo personal, pero también ofrece un amplio abanico de beneficios tanto para la empresa como para cado uno de sus trabajadores. Algunos de estos beneficios y ventajas son:
- Actúa como impulsor de la promoción personal al tiempo que favorece la igualdad de oportunidades.
- Prepara al trabajador para ser más productivo, gestionar mejor su tiempo y sus tareas, tomar decisiones más eficaces, resolver conflictos surgidos en la organización, etcétera.
- Incrementa el grado de satisfacción en el puesto de trabajo y con ello, el nivel de fidelidad y compromiso del trabajador respecto de la empresa.
- Facilita y estimula la integración de los trabajadores con el resto de compañeros y en la empresa en su conjunto.
- Ayuda a lograr metas personales.
- Etcétera
En la actualidad, acceder a la formación desde el trabajo es una tarea muy sencilla. Todas las empresas disponen de unos fondos anuales que provienen de las cotizaciones de la seguridad social y que pueden destinar a acciones formativas para sus empleados. De hecho, se trata de unas asignaciones que no son acumulables año a año, es decir, si la empresa no las gasta durante el año actual, habrá perdido esa oportunidad.
Junto a ello, también existen multitud de centros de formación y escuelas de altísima calidad que ofrecen un amplio abanico de programas formativos para trabajadores y empresas, tanto bajo modalidad presencial como a distancia u online, y plenamente adaptados a las necesidades y circunstancias de cada ocasión.
Algunos de los cursos que se pueden encontrar son del tipo Master MBA en Dirección de Empresas, Master BIM en Madrid Arquitectura Revit o cursos de Negociaciones Eficaces, Habilidades de Comunicación, Gestión del Tiempo, Planificación de Reuniones, Liderazgo y Gestión de Equipos, Presentaciones Profesionales, Prevención del Estrés, Resolución de Conflictos, Análisis y Toma de Decisiones, Inteligencia Emocional, Gestión de Crisis y Cambio, Habilidades Directivas y mucho más.
Ahora, mantenerse plenamente formado, es sólo cuestión de voluntad. ¿A qué esperas?.
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